El mundo automotriz está en constante evolución, y Stellantis parece estar reajustando su rumbo, con un enfoque renovado en la pasión por los motores de combustión. Un reciente informe de Bloomberg agita el mercado al indicar que una robusta inversión podría significar el regreso de un legendario Muscle Car Dodge V-8.
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El Regreso del Rugido: La Apuesta de Stellantis por el V8
Stellantis, el gigante automotriz detrás de marcas icónicas como Chrysler, Dodge y Jeep, está a punto de anunciar una inversión masiva de 10 mil millones de dólares en la manufactura de EE. UU. Este aporte, que duplica el compromiso inicial de 5 mil millones de dólares, será crucial para la reapertura de fábricas y la contratación de cientos de trabajadores. Sin embargo, lo que realmente capta la atención de los entusiastas es la posibilidad concreta de desarrollar un nuevo y potente muscle car con motor V8. Es un giro significativo que señala un retroceso en el enfoque puramente eléctrico que se había estado defendiendo.
El Giro de Dodge: Adiós a la Electrificación Extrema, Hola a la Performance a Gasolina
Después de una breve, pero intensa, fase de electrificación bajo el mando del ex CEO Carlos Tavares, Dodge parece estar reajustando su estrategia. La marca, sinónimo de coches de performance a gasolina, está reduciendo sus ambiciones en vehículos eléctricos y volviendo a sus raíces con modelos impulsados por combustión. Este cambio se evidencia por la cancelación del Charger Banshee EV, que prometía más de 900 caballos, y la priorización de variantes como el Charger Sixpack y sedanes de gasolina.
La apuesta por el V8 no es un movimiento aislado, sino parte de una tendencia donde la potencia tradicional encuentra su lugar, como vemos en el caso de la Ram 1500 que traerá el motor Hemi de vuelta, o la valorización del motor de combustión como símbolo de lujo y performance en modelos Porsche.
El Símbolo V8: Rumores y Expectativas
Aunque Stellantis aún no ha hecho una confirmación oficial, los indicios son claros. El propio CEO de Dodge, Matt McAlear, ya había sugerido que un V8 «cabrá» bajo el capó del nuevo Charger, añadiendo más «combustible» a los rumores. Este regreso al motor V8 para un muscle car Dodge no es solo una noticia; es un movimiento estratégico que refleja una demanda creciente de coches de performance con alma, un sentimiento replicado en otras fabricantes que también celebran la potencia, como Toyota con su GR Supra V8 o Mercedes-AMG, que también busca rescatar el V8 con un toque futurista. La expectativa es alta por lo que Stellantis revelará en los próximos años.
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Author: Fabio Isidoro
Fundador y editor jefe de Canal Carro, se dedica a explorar el mundo del automóvil con profundidad y pasión. Entusiasta de los coches y la tecnología, produce contenido técnico y análisis exhaustivos de vehículos nacionales e internacionales, combinando información de calidad con una mirada crítica al público.
